top of page
  • Foto del escritorJesús Escudero

Dolo, imprudencia grave e imprudencia menos grave en el ámbito penal.

Partiendo de cualquiera de las tres premisas anteriores: dolo, imprudencia grave o menos grave, nos puede ser un imputado un delito conforme al Código Penal. Pero no es menos cierto que dependiendo de que el origen de la acción ilícita fuera realizada dolosamente o bien de forma imprudente grave o menos grave varían las penas a imponer. Por ello la importancia de elegir un Abogado Defensor con experiencia que pueda valorar esta situación.

Poniendo un ejemplo claro, si una persona comete un homicidio con la plena intención de matar estaremos ante un delito doloso, con penas de prisión que pueden llegar hasta los quince años; sin embargo, en un homicidio por imprudencia grave la pena más alta es de cuatro años.

¿Cómo definimos el dolo en términos penales?

El dolo es una conducta que se lleva a cabo con pleno conocimiento y plena voluntad de querer realizar la acción u omisión que nos llevará a un resultado de daño a un bien jurídico protegido.

Ejemplos de dolo:

  • Si dejo una mascota abandonada en casa durante un mes sin agua ni comida, es obvio que el animal morirá, y tengo plena conciencia de ello al realizar la omisión de no atenderle debidamente.

  • Si vendo droga en un círculo determinado, soy plenamente conocedor que es una conducta prohibida y penada en el Código Penal; por ello, en caso de ser descubierto se me imputará un delito doloso contra la Salud Pública.

El dolo eventual como punto necesario hacia la imprudencia

El dolo eventual, que no deja de ser una conducta dolosa que pudiera acarrear la imputación de un delito, se produce cuando una persona actúa y conoce la probabilidad del resultado y, a pesar de conocer que ese resultado es delictivo, lo acepta y ejecuta la acción u omisión.

Ejemplos de dolo eventual:

  • Un cazador, rifle en mano, conoce y sabe que delante de él van caminando ciertas personas, pero no los visualiza; cuando aparece un animal y valorada la posibilidad de que pudiera matar o herir a otro, acepta este riesgo y termina disparando con la intención de cazar una pieza; en caso de que pudiera alcanzar otra persona, podríamos estar ante un dolo eventual. En definitiva, no quiere que el resultado se produzca, pero acepta que puede ocurrir y arriesga innecesariamente.

  • Unos padres, a pesar de estar con un embarazo de alto riesgo, deciden dar a luz en su casa sin ningún tipo de asistencia médica. El bebé muere al nacer. Es obvio que el resultado no lo deseaban ni fueron partícipes de ninguna intencionalidad, pero el resultado obtenido por la omisión de ir a un hospital fue el fallecimiento del recién nacido.

¿Podemos defender estos hechos como una imprudencia grave? Ahí la importancia de un Abogado con experiencia para ejercer una línea de defensa adecuada. El resultado puede ser cumplir una pena de prisión o no.

¿Cómo definimos la imprudencia en términos penales?

La imprudencia, en términos generales se refiere a una falta de diligencia debida en la conducta de una persona, interpretando que la propia falta de diligencia como de cuidado en la producción del resultado dañoso.

La acción u omisión por falta de la necesaria diligencia o previsión, causando un daño protegido por el Código Penal, puede derivar en una imputación de un delito.

En términos penales la imprudencia puede ser un elemento que determine la responsabilidad delictiva, teniendo el Código Penal mucha diferencia en su sentido punitivo o de castigo en caso de que una imprudencia sea considerada grave o menos grave. Incluso podemos estar, en algunos casos, en penas de prisión o bien de multa.

Diferencia entre imprudencia grave y menos grave.

La propia Jurisprudencia del Tribunal Supremo ha ido conformando esta diferencia, estableciendo, con la finalidad de calificar imprudencia grave o menos grave, los siguientes requisitos:

  1. Imprudencia grave: se exige de una gravedad alta el daño causado, unido a una falta de diligencia notoria de las más esenciales normas de cuidado, provocando un resultado gravoso.

  2. Imprudencia menos grave podemos afirmar que es toda acción que no se encuadre como imprudencia grave, puesto que, incluso, se utilizó la debida diligencia con el fin de evitar el resultado, pero éste ocurrió.

Las penas y delitos más frecuentes por imprudencia grave y menos grave.

Las penas entre imprudencia grave y menos grave son muy notorias, poniendo como ejemplo, por ser dos de los delitos más típicos para establecer una estrategia de defensa en conseguir una calificación de menos grave:

  1. En el delito de lesiones, el Artículo 152 del Código Penal establece penas muy dispares en función de que el delito se derive por una imprudencia grave o menos grave, estableciendo en este último caso pena de multa económica, y en el primer caso penas de prisión que pueden ir hasta los tres años.

  2. En los delitos de homicidio también establece una clara diferencia en función de ambas posibilidades que estudiamos: si la acción homicida se realiza por una imprudencia grave la pena de prisión puede ser hasta cuatro años; sin embargo, si deriva de una imprudencia menos grave, la pena será de multa económica como máximo.


bottom of page